Somos un grupo de jóvenes que a lo largo de nuestras vidas encontramos muchas preguntas sin responder. Nos dimos cuenta de que hay una historia tapada, escondida, voces acalladas, mentiras sistemáticas, silencio. Un silencio que no es casual. Un silencio del cual se benefician quienes desde adentro y desde afuera nos saquean.

Somos parte de la generación que sufre la desmalvinización, a la que intentan hacerle sentir vergüenza de sus héroes y de su gesta histórica.
Somos una generación que sabe que hubo genocidas cobardes, que siente una herida abierta, y que está muy lejos de cerrarse.
Somos de la generación que año tras año ve como los diferentes gobiernos van entregando nuestra soberanía tanto territorial como cultural, científica y económica, regalando nuestros recursos naturales, desmantelando nuestra educación, nuestra industria y tratando de callar a los que intentan alzar la voz.
Así fue que nos contactamos a partir de redes de e- mail, foros y actividades y decidimos ponernos de pie y unirnos compartiendo experiencias y asumiendo desafíos.
Nuestra agrupación la integran hijos de veteranos de Malvinas y también personas movilizadas por la causa, que la sienten como propia, porque lo es.
Aprendimos que la indiferencia es una mentira, que la historia nunca te pasa por enfrente, sino que te atropella, te pasa por encima y te coloca en un bando o en el otro.
No nos une un sentimiento nacionalista, de simple colores, vacío de contenidos humano, que muchos políticos y oportunistas han sabido aprovechar a lo largo de nuestra historia.
Nos une el amor a la Patria, a la Verdad, a la Justicia a la Memoria de nuestro pueblo.
Entre nosotros también existen diferencias y puntos de vista pero nos une la voluntad de luchar por una Argentina libre y soberana.
Por eso para quienes militamos en la causa Malvinas, esta significa mucho más que un pedazo de tierra, implica valores como la solidaridad, educación, defensa de nuestra soberanía, respeto por el prójimo, los símbolos patrios y nuestros héroes, el trabajo y la lucha constante. Estas son las premisas que hemos aprendido desde chicos y a las cuales NO RENUNCIAREMOS.